Jack el islamizador

25 07 2008

_1934548_hanaei_isna_300De seguir la teoría del experto investigador del FBI Robert Ressler, el fracaso conjunto de Scotland Yard y la policía londinense en atrapar al Destripador debe achacarse a la equivocada elección del perfil criminológico que los llevaría hasta el homicida. Ressler asegura en uno de sus libros sobre crímenes y serialidad que el escurridizo Jack, quien se alzara con al menos cinco víctimas antes de retirarse misteriosamente de la escena pública, no era un miembro de la familia real ni un prestigioso médico afectado por las manías del señor Hyde; mucho menos un matarife judío o un hechicero, ésto último según sugiriera el ocultista Aleister Crowley.

En opinión de Ressler, se trataba de un varón que contaba con no más de cuarenta años, heterosexual (cada asesino mata al género que es objeto de su deseo), habitante del sórdido distrito de Whitechapel, escenario de los ataques (pues es sabido que conocía bien los vericuetos de huida que ofrecían sus callejones y pasadizos), perteneciente a la clase baja o media baja (un aristócrata o tan sólo un caballero de atuendo elegante paseándose por la zona del bajo mundo hubiera hecho sonar la alarma para los cientos de agentes y patrullas de vecinos que vigilaban cada esquina). En suma, un individuo capaz de esconderse entre la multitud de harapientos que el Londres victoriano toleraba merced a las dádivas otorgadas por las asociaciones de damas de caridad y los dones concedidos por la buena de Dios. Lee el resto de esta entrada »